27/06/2003
                
            
            Comisión de Derechos Humanos de la ONU
            
                
                        
                        
              Social Watch 
                
            
            Los Relatores Especiales/representantes, expertos y presidentes de los grupos de trabajo sobre Procedimientos Especiales de la Comisión de Derechos Humanos, reunidos en Ginebra del 23 al 27 de junio de 2003, expresaron su alarma ante las crecientes amenazas contra los derechos humanos que requieren una renovada determinación para defender y promover estos derechos. 
             
               
Ginebra, 27 de 
Junio 2003. En el día de hoy se clausuró la 10ma Reunión de Relatores 
Especiales y Expertos integrantes de los grupos de trabajo de la Comisión de 
Derechos Humanos de la ONU. Durante toda la semana se discutieron los  temas más 
relevantes del trabajo de los Relatores Especiales y Expertos, así como los 
grandes temas y obstáculos encontrados para el goce de los Derechos Civiles y 
Políticos y los Derechos Económicos Sociales y Culturales. Una sesión especial 
fue dedicada al tema de la globalización y su impacto en el pleno de goce de los 
derechos humanos. 
Durante la 
semana también se realizaron sesiones de dialogo interactivo con las ONGs, 
convocando a un mayor involucramiento de éstas en el trabajo de los Relatores 
tanto en el plano nacional como internacional. El informe Social Watch fue 
citado por algunos relatores como un ejemplo del aporte de las ONGs al trabajo 
de estos expertos en lo que refiere a la información cuantitativa así como 
cualitativa. 
Al finalizar 
la reunión los Relatores Especiales y Expertos integrantes de los grupos de 
trabajo de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU realizaron una declaración 
conjunta expresando la amenaza sobre los derechos humanos que constituye la 
multiplicación de políticas, legislación y prácticas que se han adoptado en 
ciertos países en el nombre de la lucha contra el terrorismo. 
Declaración 
Conjunta
  
de los
  
Relatores Especiales/representantes, expertos y presidentes de los grupos de 
trabajo sobre Procedimientos Especiales de la Comisión de Derechos Humanos 
Los Relatores 
Especiales/representantes, expertos y presidentes de los grupos de trabajo sobre 
Procedimientos Especiales de la Comisión de Derechos Humanos, reunidos en 
Ginebra del 23 al 27 de junio de 2003, expresaron su alarma ante las crecientes 
amenazas contra los derechos humanos que requieren una renovada determinación 
para defender y promover estos derechos. También hicieron notar el impacto de 
este ámbito en la eficacia y la independencia de los procedimientos especiales. 
Aunque comparten 
la inequívoca condena del terrorismo, expresaron profunda preocupación ante la 
multiplicación de políticas, leyes y prácticas que están siendo adoptadas cada 
vez más por muchos países en nombre de la lucha contra el terrorismo, las que 
afectan negativamente el goce de todos los derechos humanos; civiles, 
culturales, económicos, políticos y sociales. 
Llaman la atención 
sobre los peligros inherentes al uso indiscriminado del “terrorismo”, y las 
nuevas categorías de discriminación resultantes. Recuerdan que, de acuerdo con 
el Pacto Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos, y conforme a la 
Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Castigos Crueles, Inhumanos y 
Degradantes, ciertos derechos no son derogables y que cualquier medida a ese fin 
de los otros derechos garantizados por el Pacto debe hacerse en estricta 
conformidad con las disposiciones de su Artículo 4. 
Los Relatores 
Especiales/representantes, expertos y presidentes de los grupos de trabajo sobre 
Procedimientos Especiales de la Comisión de Derechos Humanos y los presidentes 
de los organismos del tratado de derechos humanos deploran el hecho de que, bajo 
pretexto del combate al terrorismo, los defensores de los derechos humanos están 
siendo amenazados, los grupos vulnerables están siendo objeto de discriminación 
en base a su origen y su situación socioeconómica, en particular los migrantes, 
refugiados y buscadores de asilo, los pueblos indígenas y las personas que 
luchan por su derecho a la tierra o contra los efectos negativos de las 
políticas económicas de la globalización. 
Con plena 
convicción afirman que cualquier medida tomada por los estados para combatir al 
terrorismo debe estar de acuerdo con sus obligaciones en relación a los 
instrumentos internacionales de derechos humanos. 
Están decididos, 
en el marco de sus respectivos mandatos, a supervisar los progresos en esta área 
y llaman a todos a renovar su compromiso con los derechos humanos, incluyendo a 
las Naciones Unidas, y estar vigilantes para prevenir cualquier abuso de las 
medidas anti-terrorismo. 
Ginebra
  
27 de junio de 2003  
            
		
	        
		
                
                
               
			
            
            
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